Se hizo el robado y terminó arrestado: insólito caso sacude a Garupá
En Garupá, un joven que denunció el robo de su moto terminó esposado después de que la Policía descubriera que no era una víctima… sino uno de los autores del asalto. El muchacho, identificado como Matías Daian E., alias “Porteño”, quedó detenido y la Justicia ya busca a su cómplice.
Todo empezó cuando Luciano C., de 31 años, denunció que dos motochorros lo acorralaron en la madrugada del martes en las calles Güemes y 49, lo apuntaron con un arma y le robaron su Honda GLH 150, el celular y el casco. En medio de la fuga, los ladrones dejaron tirada una Motomel roja y negra, un detalle que parecía mínimo… hasta que se volvió la pieza central del rompecabezas.
La moto abandonada estaba registrada a nombre de un vecino, pero quien la venía usando era su hermano: “Porteño”, un joven de 19 años recién llegado de Buenos Aires. La noche anterior había vuelto a su casa sin la moto y aseguró que también se la habían robado. Incluso hizo la denuncia formal, contando una escena que ahora quedó totalmente desmentida.
El problema para él llegó cuando los investigadores cruzaron cámaras, testimonios y movimientos previos: las imágenes lo ubicaban en la zona del asalto, los horarios no coincidían y su versión se caía como una torre de naipes. Las pericias técnicas terminaron de confirmar que su “hurto” era inventado y que, lejos de ser víctima, estaba involucrado en el ataque a Luciano C.
Con las pruebas sobre la mesa, el juez ordenó su inmediata detención. La Policía lo localizó horas después y lo llevó a la dependencia correspondiente, donde quedó a disposición judicial. Ahora los investigadores buscan al segundo implicado, que logró escapar pero estaría identificado. La trama criminal recién empieza a abrirse.
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