Como una costumbre histórica de la región, muchos comenzaron agosto tomando los tres tragos de caña con ruda para “ahuyentar los males”. Y aunque muchos confían en que la tradición funciona para evitar las enfermedades del invierno, lo cierto es que el popular brebaje no parece tener competencia en las cuestiones económicas ya que el octavo mes del año arrancó con varios aumentos.
La suba del dólar y la inflación imparable están empujando la actualización permanente de los productos y servicios generando así cada vez más presión en los bolsillos de los misioneros. Lejos de cambiar, la tendencia podría acentuarse en las próximas horas.
En los últimos días el gobierno misionero dispuso de una serie de subas en diferentes servicios. Mediante las disposiciones 6 y 7 de la Subsecretaría de Seguridad y Justicia de la provincia, se definió un incremento aproximado del 30 por ciento en todos los montos de las tarifas de la VTV (Verificación Técnica Vehicular) en Misiones.
“A los vaivenes que estamos pasando en nuestro país, todo aumenta y nosotros sufrimos principalmente las consecuencias de la disparada del dólar. Muchos implementos de nuestro equipamiento electrónico y electromecánico están cotizados a valor dólar”, explicó Carlos Dip, gerente de VTV El Zaimán.
Los municipios de Misiones prestan especial atención a las subas en Posadas, el principal núcleo urbano, porque suele marcar la referencia de los nuevos aumentos. En la capital ya se dieron varios aumentos y se esperan por otros.
La tarifa del estacionamiento medido en Posadas (SEM) aumentó un 50 por ciento. Desde la comuna argumentaron que con la suba se pretende lograr una rotación permanente de los vehículos en las zonas céntricas y administrativas, con el fin de cumplir con el espíritu de este servicio que busca evitar la permanencia de los automóviles en el microcentro.
El principal malestar vendrá con las nuevas subas en el boleto del colectivo que regirán desde el próximo lunes. Desde ese día volverán a actualizarse los valores del boleto único en la zona metropolitana, por lo tanto en Posadas su valor con SUBE será de 50 pesos y de 70 pesos sin el plástico. En Garupá costará 65 pesos con tarjeta y 90 pesos sin ella. Asimismo, el servicio entre Posadas y Candelaria pasará a valer 76 pesos con SUBE y para quien abone en efectivo el costo llegará a 100 pesos.
“Vemos con preocupación el nuevo incremento del transporte público. Principalmente para los que viven en Candelaria y Garupá, pero trabajan en Posadas, ya que son quienes más caro van a pagar”, lamentó el integrante del Movimiento de Acción Vecinal, Luis Gilardoni.
Los usuarios tienen varios reclamos para con el Grupo Z, encargado del servicio de transporte urbano público de pasajeros. Entre las innumerables críticas a la prestataria se siguen mencionando las más graves: el deficiente servicio en general y el nocturno en particular, la falta de frecuencias en los barrios populares, la eliminación del saldo al “descubierto” si la tarjeta se quedó sin carga y el costo del plástico, por extravío que es de 1.000 pesos, mientras que en el AMBA sólo se paga 126 pesos.
Lo que más preocupa es la suba en los alimentos que, aunque son una constante, se dispararon por la suba en el dólar que hubo en las últimas semanas producto de la incertidumbre política del país.
Sergio Uhrig, gerente de Huevo Campo de Posadas, comentó que con la suba del dólar aumentaron los costos de producción y aseguró que algunas empresas y productores también se ven fuertemente afectados por la falta de insumos necesarios para producir.
“Lamentablemente cuesta conseguirlos en el mercado como también los mismos ingredientes para fabricar el maple de papel para trasladar los huevos”, contó Uhrig. El costo del maple se encareció casi un 40 por ciento.
El faltante de combustible es otra de las preocupaciones recurrentes en la provincia. A diario se repiten las postales de las largas filas de autos, tanto con patente argentina como con chapa extranjera, a la espera de cargar algunos litros. Incluso, en estos últimos días se observó que dicha situación causó un caos en el tránsito en algunas calles de Posadas. Con el afán de conseguir nafta o diésel se crearon grupos de Whatsapp donde se informa sobre las estaciones de servicio que están abastecidas.
Ante las subas, la escasez y la incertidumbre política, el gobierno renovador se mantiene expectante por la asunción de Sergio Massa como ministro de Economía, Desarrollo y Agricultura. Aunque en un primer momento el gobernador Oscar Herrera Ahuad vio con buenos ojos la llegada del tigrense (“Siempre ayudó a Misiones”, dijo días atrás”), aseguró que Misiones no permitirá medidas de ajuste que afecten al normal desarrollo de sus actividades productivas.
Herrera Ahuad indicó que “uno de los temas transversales en la agenda donde estamos los gobernadores del Norte Grande tiene que ver con la equiparación del subsidio del transporte en lo que hace al AMBA y las provincias” por ello advirtió que “sería un castigo feroz para Misiones y las provincias del Norte Argentino que esto suceda (por la aplicación de ajustes) en lo que hace al transporte, que ya de por sí tenemos asimetrías”.
“Si se tiene que ajustar, tendrá que ajustarse en los niveles que corresponde donde se encuentran los desfasajes más importantes”, apuntó y agregó: “Lo mismo pasa con el tema de la energía, si se observa la tabla energética en cuanto a lo que hace al transporte de energía, Misiones está entre las provincias que más carga de transporte de energía tiene y en ese caso somos iguales que todos”.
Desde su asunción, Herrera Ahaud viene insistiendo ante Nación por el reconocimiento de una serie de “deudas históricas”, que van desde inversiones de energéticas y de desarrollo hasta la coparticipación. “Misiones es la octava economía de la argentina y es la provincia número 18 en recibir coparticipación federal”, remarcó el gobernador.
