En los surtidores de Posadas, la Infinia pasó de 999 a 1.063 pesos, la súper de 831 a 885 pesos, la Infinia Diésel de 1.070 a 1.139 pesos y el Diésel 500 pasó de 869 a 925 pesos.

Los constantes aumentos están impactando en el consumo. La venta de combustible se redujo a la mitad en Misiones durante enero, en comparación con diciembre, a raíz de los sucesivos aumentos de precios aplicados a finales de 2023 que duplicaron los valores por cada litro.

Además de una caída del consumo de los usuarios locales, se derrumbó la venta en las ciudades de frontera donde, hasta diciembre, paraguayos y brasileños llenaban el tanque a diario por la diferencia cambiaria que los beneficiaba. Esa ventaja se terminó y dejaron de venir.

“Las ventas cayeron notablemente. Estamos vendiendo un 50 por ciento menos de lo que vendíamos en la zona de Misiones”, explicó el presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio y Afines del Nordeste (CESANE), Faruk Jalaf y agregó que “en otras regiones del país la venta ha caído un 20 a un 30 por ciento. Pero acá en la zona de Misiones, como había mucha venta a turistas, a extranjeros y a empresas que venían de otros países con camiones a cargar, todo eso se cayó”.

Después de la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada, las naftas acumularon una suba del 74 por ciento. Fue el resultado de dos incrementos consecutivos (el primero el 14 de diciembre y el segundo, el 3 de enero) de YPF, la petrolera de capitales estatales que marca el rumbo del mercado.

A esos aumentos hay que sumarle el último de Alberto Fernández, que el 8 de diciembre autorizó un incremento del 24 por ciento. En total, y en menos de dos meses, los combustibles se incrementaron un 116 por ciento.

“Esa caída de ventas nos perjudica a todos -empresas y consumidores-, porque nuestros costos siguen aumentando a la par de la inflación. Este incremento va a derivar en una caída mayor de venta de combustibles, y nuestros ingresos siguen congelados en pesos”, detalló Jalaf.

En el Mercado Central de Posadas hay preocupación por el impacto de las subas del combustible en los costos del flete, lo que se traslada a los productos. Las ventas están planchadas debido a que los consumidores restringieron las compras.

“El común de la gente se ve obligada a elegir entre preparar una comida básica, que lleva una papa y una cebolla, o suprimir el postre. Y bueno, como ya no hay más recursos donde ajustarse, suprime las frutas, por eso se cayeron las ventas. Salvo la banana que es un alimento deseado, lo demás se vende poco y nada”, contó el operador del Mercado Central, Bruno Deis.

La inflación no es el único problema en la Tierra Colorada. La paralización de nuevas obras públicas, la situación compleja de los municipios en el actual contexto económico en el país y la lucha contra el dengue representaron algunos de los temas principales abordados por la Comisión de Desarrollo Estratégico e Integral de Municipios (Codeim).

El vicegobernador Lucas Romero Spinelli ponderó la importancia del encuentro, por la posibilidad de poder escuchar las necesidades de cada municipio.

“La unión es lo más importante, intercambiando experiencias, es bueno que nos veamos las caras para encontrar puntos en común y optimizar la asignación de recursos. Hay obras paradas, pero no se ha detenido al ciento por ciento, se sigue avanzando, cuidando los recursos, fomentando la instalación de industrias”, sostuvo Romero Spinelli.

La caída en los recursos de Nación tiene en vilo a los intendentes, a los que les llega una parte de esos fondos, sea en dinero o en obras. Misiones se ubicó en el último lugar del reparto de enero 2024 de la Coparticipación Federal, con una pérdida en términos reales del 16,9 por ciento. Así lo reveló la consultora Politikon, cuyo informe marcó el duro golpe que la región NEA tuvo al momento de distribuirse los fondos impositivos federales.

En términos interanuales reales, reveló que Misiones perdió hasta enero 2024 nada menos que 14.825 millones de pesos.

Según datos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) en base a datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y de la Dirección Nacional de Asuntos Provinciales (DNAP), la provincia perdió 8.800 millones de pesos de la coparticipación de enero, lo que equivale a 6.700 pesos por habitante, debido a la caída de la recaudación por efecto de la crisis económica nacional, la paralización de muchas actividades y la pérdida de poder adquisitivo de los salarios ante la inflación.

La coparticipación es el principal componente de ingresos de las provincias. A Misiones le significa el 50 por ciento de sus recursos mensuales. El otro 50 por ciento proviene de la recaudación propia de Rentas.

Ante ese panorama, tanto los políticos como los consumidores hacen números y evalúan cómo recortar gastos. El ajuste les llegó a todos.