Panorama Político de Misiones
Caos

Masiva demanda para acceder a la vivienda propia

La masiva inscripción revela la gran demanda habitacional que hay en la capital misionera y las dificultades que tienen las personas de clases media y baja para acceder a la casa propia por otros medios. (Dibujo: NOVA)

La nueva convocatoria del Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (IPRODHA), para adjudicaciones de viviendas en Posadas generó una demanda de tal nivel que el sistema digital donde se realizaban los trámites colapsó durante varios días.

Desde el IPRODHA manifestaron que en menos de 24 horas hubo más de 10 mil visitas en el sitio web, lo que saturó el sistema de la entidad y obligó a la entidad a pedir paciencia a los interesados ya que hasta el 5 de septiembre hay tiempo para inscribirse.

Aunque todavía no está la cifra final de viviendas que se van a adjudicar en un nuevo sector de Itaembé Guazú de Posadas, se van a sortear 900 cupos, en cuatro etapas, desde el próximo 9 de septiembre.

La masiva inscripción revela la gran demanda habitacional que hay en la capital misionera y las dificultades que tienen las personas de clases media y baja para acceder a la casa propia por otros medios.

La novedad de esta convocatoria, y lo que según las autoridades explicaría el aluvión de solicitudes, fue la apertura a personas solteras (parejas o individuales). “Nuestra provincia tiene una población muy joven, con muchos profesionales que tienen como objetivo tener una casa propia. El IPRODHA, escuchando la demanda, destinó un cupo para esa demanda”, dijo la directora de Adjudicaciones, Cristina Lakomski.

Para poder inscribirse, la sumatoria de ingresos familiares formales (con recibo de sueldo, autónomos o monotributistas) debe ser de 2,5 salarios mínimos, vitales y móviles (SMVM). Si no llegan a reunir esa condición, el Instituto habilitó la figura del “principal pagador”, que será una persona externa al grupo familiar que se inscriba y que se hará cargo del pago mensual de la cuota.

La convocatoria llega en un momento de incertidumbre económica. La crisis golpea de diferentes formas a la región mientras el gobierno nacional no responde con celeridad a las necesidades de la provincia. El malestar entre provincia y Nación quedó evidenciado en dos hechos particulares esta semana.

Por una parte, tuvo gran repercusión nacional el conflicto en la empresa Dass, de la ciudad de Eldorado, por el despido de casi 100 empleados. La fábrica de zapatillas, que fue visitada el año pasado por Alberto Fernández cuando anunciaron una inversión de 25 millones de dólares, había justificado la medida por la imposibilidad de importar insumos.

“Las trabas a las importaciones de insumos para producir, sumado a las medidas anunciadas por el Banco Central, el pasado junio, en donde se pone en vigencia un nuevo régimen de importaciones, que limita el acceso a dólares de las empresas que importan para producir localmente, perjudicando en mayor medida a las empresas que durante el 2021 incrementaron su estructura productiva: invirtiendo en el país, apostando al crecimiento de la producción nacional y generando puestos de trabajo, obligan a Grupo Dass a reestructurar sus fábricas para poder sobrellevar la situación”, expresaron desde la firma.

La situación generó un cruce de opiniones. Desde el gremio aseguran que se trata de una maniobra especulativa porque, entienden, la empresa los despidió para volver a contratarlos días después, pero esta vez bajo los beneficios que impulsa el Gobierno en la generación de empleo genuino a través de los beneficiarios de planes sociales.

“Es inentendible la posición de la empresa cuando hace menos de un mes tomaron diez empleados debido al aumento de la producción”, señaló el delegado gremial Darío Vera.

Tras horas de angustia, los casi 100 empleados que habían sido notificados de sus despidos, encontraron un poco de alivio. Luego de la conciliación obligatoria dispuesta se llevó a cabo una reunión virtual entre representantes de la compañía y autoridades de los ministerios de Trabajo de Nación y Provincia, y en el cónclave, la empresa que fabrica zapatillas marca Nike y Adidas en el país, aceptó dar marcha atrás con la medida y los 97 empleados cesanteados pasaron a ser suspendidos con jornada paga.

Ante la situación, el gobernador Oscar Herrera Ahuad, intercedió ante el Ejecutivo nacional para que le liberen importaciones a la empresa. El mandatario también tuvo un mal trago por la demora en las obras del aeropuerto de Posadas.

Aeropuertos Argentina 2000 informó el retraso en las obras y anunció que el aeropuerto volverá a funcionar casi un mes después de lo previsto, a principios de octubre.

El mandatario misionero apuntó contra el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) y Aeropuertos Argentina 2000, a quienes responsabilizó por esta situación. “La provincia y el sistema empresarial hizo fuertes inversiones en la reactivación del aeropuerto en la fecha comprometida”, señaló.

Esta decisión inconsulta, fundada según la empresa en problemas climáticos que no permiten sostener el ritmo de obras, disparó el enojo y llevó al gobernador a manifestarse a través de la red social Twitter. Molesto por los argumentos esgrimidos por la empresa, Herrera Ahuad anunció que recurrirá a "acciones pertinentes en el ámbito que corresponda para mitigar el daño económico en el incumplimiento de los plazos establecidos".

La queja del gobernador tuvo el respaldo de su antecesor, Hugo Passalacqua, quién fue más allá y parafraseó a José Gervasio Artigas: “Buenos Aires siempre da amarguras”. El ex mandatario señaló que ahora queda “reclamar a la Nación para que no haya otro delay. Es lo mínimo que podemos esperar, ya se demoraron tres semanas de lo prometido”.

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